Como la Ratita Presumida, limpio y limpio mi casita.
Y en esta especie de ataque
que ahora padezco
me felicito por dejarrne llevar,
porque es bueno para el alma y para el cuerpo
tirar los trapos sucios
y desprenderse de esas mochilas viejas
que pesan como muertos
a los que por querer dar una digna sepultura
te abocan a la desventura.
Quizá con el "Tennga Vd.,señora"
consiga dejarlo todo a punto
y cuando vuelva del mar,
pueda sentirme en mi casa a gusto.
No puedo desaprovechar esta oportunidad...
"-Ratita, Ratita, eres la más bonita
- le dijo el Ratoncito muy nervioso.
¿Te quieres conmigo casar?
- Tal vez, pero ¿por las noches, cómo harás?
- Por las noches dijo él-, dormir y callar.
- Entonces, !contigo me he de casar!"
Así nos lo contaron