de que estés partida,
de tus malintencionadas mentiras,
de los fracasos de tu vida..,
sigo creyendo en tu mirada.
Cuando te miras al espejo
reencuentro algo de la verdad que perdí,
los principios que olvidé
los sueños que algún día forjé.
Me devuelves lo que fui
El destino me ha condenado con una mirada insobornable, una mirada dura, pero un corazón frágil.