"Comer bien, dormir bien, ir donde se desea, permanecer donde interese, no quejarse nunca y, sobre todo, huir como de la peste de los principales monumentos de la ciudad"
Y con vida esta ciudad, aprovechando el buen tiempo para secar la colada. Difícil reconocer a una ciudad por una calle cualquiera porque nos solemos fabricar ciudades con sus calles nombradas. Saludos
Ventana de Foto, yo hago lo mismo que tú y me encanta cuando nos pones esos estupendos reportajes. En este caso, si pongo los monumentos o edificios emblemáticos de esta ciudad ya sabrías cual es!! Y no se trata de eso...hablo de una ciudad cualquiera...
K@miz, siguiendo con la reflexión anterior, es una ciudad que, por un lado, muestra su cara más bella, pero por otro, enseña sin pudor sus heridas abiertas, sus solares vacíos, casas semiderruidas, paredes desconchadas y ropa secándose al sol. Sorprendente!
Junto a lo viejo lo joven, junto a lo cutre lo nuevo.
Una calle no dice mucho, pero una calle así en el entorno en el que se encuentra dice mucho. Lo que pasa que no he sacado el entorno convirtiendo este detalle en unas casa de una ciudad cualquiera. Besos, y gracias por pasarte.
Me acabas de tocar la fibra amiga, eso precisamente es lo que quiero yo, y llevo ya cinco meses que no lo puedo conseguir, y no me quiero quejar, pero simplemente quiero eso, libertad para poder actuar normalmente, como echo de menos la normalidad. Un fuerte abrazo.
Tienes razón, la vida en las ciudades no sale en las guías turísticas. Cuando viajo y me dejan, me gusta perderme en los mercados, en el metro, en el autobus, callejear por los barrios de las ciudades que visito...
A mi siempre me ha gustado callejear por las ciudades que visito, no ir por dónde va todo el mundo como el ganado. Y siempre he encontrado sitios maravillosos. Esas son las mejores postales.
¿Sabes lo que más me gusta visitar? Los mercados de abastos. Marearme de olores, buenos y malos. Y callejear de tal forma que me vea en la obligación de saltar desde un andamio a cuatro o cinco metros si acaso tres tipos muy sospechositos ellos siguen tras de mí más calles de las recomendables. Pasas miedo, incomodidades..pero no hay otra forma de conocer la dermis de una ciudad y de descubrir en todo su apogeo, y por comparación con lo feo, su hermosura.
Muy bueno el post. Como siempre siempre siempre Un besito, Pat
Inundarse y dejarse estar en esos recovecos de la ciudad ..... (quizás Hondarribia?).
ResponderEliminarmi beso.
Frío...frío...
EliminarBesos
Pues yo soy de visitar los monumentos de la ciudad para luego perderme por sus calles.
ResponderEliminarBesos
http://ventanadefoto.blogspot.com.es/
Y con vida esta ciudad, aprovechando el buen tiempo para secar la colada. Difícil reconocer a una ciudad por una calle cualquiera porque nos solemos fabricar ciudades con sus calles nombradas.
ResponderEliminarSaludos
Ventana de Foto, yo hago lo mismo que tú y me encanta cuando nos pones esos estupendos reportajes. En este caso, si pongo los monumentos o edificios emblemáticos de esta ciudad ya sabrías cual es!! Y no se trata de eso...hablo de una ciudad cualquiera...
ResponderEliminarbesos,
K@miz, siguiendo con la reflexión anterior, es una ciudad que, por un lado, muestra su cara más bella, pero por otro, enseña sin pudor sus heridas abiertas, sus solares vacíos, casas semiderruidas, paredes desconchadas y ropa secándose al sol. Sorprendente!
ResponderEliminarJunto a lo viejo lo joven, junto a lo cutre lo nuevo.
Una calle no dice mucho, pero una calle así en el entorno en el que se encuentra dice mucho. Lo que pasa que no he sacado el entorno convirtiendo este detalle en unas casa de una ciudad cualquiera.
Besos, y gracias por pasarte.
Gracias, Anderea...Como no puedo comentar en tu blog te lo agradezco a través de aquí. Yo también me siento así; anudada a mi ciudad.
ResponderEliminarMuxus
Anderea: Bilbao- http://anderea2157.blogspot.com.es/2013/10/bilbao.html
El encanto de un lugar está en la ropa tendida y el olor a puchero, la vida más acá.
ResponderEliminarAbrazos, siempre
La vida sin adornos, la vida ocupada por personas, el hogar...
ResponderEliminarbesos, Amando
Me acabas de tocar la fibra amiga, eso precisamente es lo que quiero yo, y llevo ya cinco meses que no lo puedo conseguir, y no me quiero quejar, pero simplemente quiero eso, libertad para poder actuar normalmente, como echo de menos la normalidad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Recibida la postal amiga!
ResponderEliminar:)
Nena esta música me da la vida!!!
Besotes!
Mi desconexión era necesaria, jajajajaja...me alegra estar de nuevo, renovadita que vengo!
Tesoro!
Tienes razón, la vida en las ciudades no sale en las guías turísticas. Cuando viajo y me dejan, me gusta perderme en los mercados, en el metro, en el autobus, callejear por los barrios de las ciudades que visito...
ResponderEliminarBesos.
A mi siempre me ha gustado callejear por las ciudades que visito, no ir por dónde va todo el mundo como el ganado. Y siempre he encontrado sitios maravillosos. Esas son las mejores postales.
ResponderEliminarMe gustó esta entrada, un abrazo, Pat.
ResponderEliminarFeliz semana. Un beso.
Linda foto.
ResponderEliminarBeijos meus
Morris
Ah, Paco...!Como se echa en falta cuando uno no tiene lo que siempre ha tenido! Comprendo tu malestar y tu queja...!Quéjate, ¿porque no?
ResponderEliminarBesos,
remei...que a gusto reencontrarte aquí y con la fueza renovada. !! Desde luego tu velero es de alucinar...o sea que estás genial, esperooo!!
ResponderEliminarBesos,
Chapi...observando, mirando hacia las alturas se descubren cosas sorprendentes...Bueno, !a quién se lo voy a decir!
ResponderEliminarYa lo sabes,
besos,
Amapola, Morris, gracias!
ResponderEliminarBesos,
Eduardo...la cara no siempre es un reflejo del alma..
ResponderEliminarBesos,
Lo sabes...
ResponderEliminarBesos, Eduardo
¿Sabes lo que más me gusta visitar? Los mercados de abastos. Marearme de olores, buenos y malos. Y callejear de tal forma que me vea en la obligación de saltar desde un andamio a cuatro o cinco metros si acaso tres tipos muy sospechositos ellos siguen tras de mí más calles de las recomendables. Pasas miedo, incomodidades..pero no hay otra forma de conocer la dermis de una ciudad y de descubrir en todo su apogeo, y por comparación con lo feo, su hermosura.
ResponderEliminarMuy bueno el post. Como siempre siempre siempre
Un besito, Pat
Lo mejor es perderse en las ciudades que uno no conoce, o que conoce....
ResponderEliminarEn esas perdidas es posible que uno se encuentre a si mismo
Un abrazo fuerte, amiga
Antiqua, eres un poeta...
ResponderEliminarGracias,
besos,
jaja!!! Luis...Eso es una excusa para mantenerte en forma...(digo lo de correr y saltar así...) jajaja!!
ResponderEliminarBesos,