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| Mi hijo el pequeño, encantador...una maravilla al que nunca he tenido que castigar. Realmente nunca me ha hecho falta castigar a mis hijos ..Los adoro. |
Las naturalezas inferiores repugnan el merecido castigo; las medianas se resignan a él; las superiores lo invocan.
Arturo Graf (1848-1913) Escritor y poeta italiano.
Sólo yo tengo el derecho de corregir, pues sólo puede castigar quien ama.
Rabindranath Tagore (1861-1941) Filósofo y escritor indio.
Alejandro Sanz. Si hay Dios...
Me quedo con la última frase...Castigo porque amo....(¿?)y Tu?
ResponderEliminarEl verdadero amor no castiga, perdona…aunque no regrese.
ResponderEliminarPatt, preciosa foto…tu hijo es encantador.
Pases una linda semana.
Un abrazo
Gracias Ceciely, Eres un amor.
ResponderEliminarBesos,
Uhmmm... eso huele a conciencia que no está tranquila.
ResponderEliminarUn castigo a tiempo y con cariño no es más que una corrección, lo contrario roza con la comodidad, la tranquilidad y el pasotismo. Luego se utiliza el argumento de la mala suerte y que el "protagonista Ha salido así". La recompensa por una atención adecuada siempre llega. (Sin confundir con el autoritarismo).
Saludos.
Gracias máximo. Hacía tiempo que no venías. Gracias vecino. Gracias.
ResponderEliminarBesos
Creo que el castigo es difícil aplicarlo cuando se ama. Y si es nuestro hijo duele más que nada. Más que castigo hay que hablar, hacer entender...
ResponderEliminarEn fin, Pat... :)
Besos, guapa.
Castigar é uma forma de carinho, muitas vezes preciso.
ResponderEliminarFique bem.
Aclararos que no me hace falta castigar; puedo reñir, pero no castigar (uff! qué verbo tan feo ¿no?)
ResponderEliminarBesos,
Castigar a veces es necesario, nos guste o no, si no se aceptan ciertas normas, luego es imposible respetarlas y ya ves qué pasa, no hace falta que te lo explique, tú eres la experta, amiga mía. Lo que pasa es que nos duele más que a ellos, somos así, jeje.
ResponderEliminarUn abrazo y un beso para tu tesoro.
Quien tenemos hijos sabemos lo que es, la dude que nos crea, castigo o no?, aunque por la cara me creo que el castigo no ha sido muy duro.
ResponderEliminarUn abrazo.
De hecho, quien ama, castiga siempre. Por el mero hecho de amar. Es la opinión de una naturaleza inferior, que sueña llegar a superior y ser castigada.Un abrazo
ResponderEliminarUna cuestión dificil, muy dificil.
ResponderEliminarHay veces que es irremediable, aunque nos duela.
Dicen que con el tiempo se aprende, se valoran mejor las cosas y ... también se olvida.
Un abrazo, Pat.
Desde luego a mí ya me cayó más de un castigo jaja!!
ResponderEliminarBesos, y gracias.
¿Quien va a castigar a un Ángel que toca el arpa?
ResponderEliminarPreciosa foto Pat.
Besos.
Bonito comentario,Mínimal. Creo que esta entrada tenía que haberse titulado así. Gracias.
ResponderEliminarBesos,
jamás castigué a mis hijos, solo a una, le ordené una penitencia y lloré tanto que nunca más
ResponderEliminar.
saludos
Hola Omar. Yo no sé si mis padres lloraron alguna vez, pero sí que sé que sufrían....Lo pasaban mal. Te entiendo...
ResponderEliminarPor cierto, he pasado por tu blog. La poesía de Rimas: Pertenzas es preciosa! ¿Solo puedo comentar a través de Google Plus?
Si me lees me dices, por favor.
Gracias,
Besos,