Dicen las malas lenguas
que el desencuentro
se ha cruzado en sus caminos
que una palabra a destiempo
o una observación mal entendida
ha bifurcado la ruta compartida
que las ortigas crecen
en los bordes de las veredas
y las alambradas y estacas
en los lindes de las sendas,
que la cruel maleza hiere sus cuerpos
al tomar distancias en la búsqueda
de nuevos recorridos
que no tienen tiempo de sentir el corazón
ni permitirse el sufrir un duelo...
....aunque se murmura
que algún caminante salió herido
ya que hay oscuras señales
ya que hay oscuras señales
a lo largo del infinito sendero de tierra
y susurran las mismas palabras
las ramas de los árboles
cuando se mecen y tratan anhelantes
de acariciarse bajo la luna llena:
Estacas y Ortigas ...
....algo duele...
No es lo mismo que antes
ni tampoco lo deseado en el presente.
(Un poema de sueños
en momentos de lucidez.
Yo recorro un camino
lleno de intuición,
fuera de la razón
y me duele el dolor absurdo
de lo absurdo de la situación...)
y susurran las mismas palabras
las ramas de los árboles
cuando se mecen y tratan anhelantes
de acariciarse bajo la luna llena:
Estacas y Ortigas ...
....algo duele...
No es lo mismo que antes
ni tampoco lo deseado en el presente.
(Un poema de sueños
en momentos de lucidez.
Yo recorro un camino
lleno de intuición,
fuera de la razón
y me duele el dolor absurdo
de lo absurdo de la situación...)